Los peones van primero
y los consumidores después;
“Rozame el sueño
que este insomnio
ya tiene muchos ojos”
Dijo con las manos hechas cuenco
y en un violento revés
invoca al viento.
Sobre la mesa
sobran las masas.
Juegan sus cartas
quienes saben del tema
y quienes no, TOCAN DE OÍDO.
Ante un coro que parece rendido
pero que, convocado en la plaza
aplasta y quema todo a su paso.
Retiro lo dicho y cantamos retruco.
A ustedes invoco de nuevo
a romper la cuarta pared
y ser tan yo, como yo ustedes…
Que aunque algunos no quieren,
somos más y mejores,
somos pacíficos
pero nos regimos por la ley
del péndulo:
Cuanto más alto flota,
más fuerte la caída
y cuanto más fuerte la caída,
más neoliberal.
El futuro fue una mierda
pero por suerte no estamos solos.